El secretario general del PSOE y portavoz municipal en el ayuntamiento de Santander, Pedro Casares, apoya las reivindicaciones de los trabajadores de Parques y Jardines.
Casares, que ha acompañado hoy a los trabajadores en una nueva concentración, en la plaza del ayuntamiento, ha destacado que el PSOE apoya y defiende las reivindicaciones de la plantilla porque es “algo que es justo”.
“Los trabajadores están aquí defendiendo sus derechos, los derechos laborales, sus puestos de trabajo y la calidad del servicio por mucho que el equipo de gobierno, la alcaldesa Gema Igual y el concejal del área traten de mentir y engañar a los trabajadores y a la ciudadanía” ha subrayado el edil.
En este sentido, el portavoz del PSOE señala que “está claro” que con una baja desproporcionada del 17% está en riesgo el futuro de este servicio. “Cuentan con todo nuestro respaldo y trataremos de hacer todo lo posible para que no se adjudique en estas condiciones el servicio” afirma Casares.
Por otra parte, el líder de los socialistas santanderinos recuerda que, como se acordó en la comisión de Desarrollo Sostenible, sigue pendiente la entrega a los grupos municipales del Informe de solvencia de la oferta económica presentada por la empresa, para saber si la oferta presentada “se ajusta a los números y es viable”.
“Se acordó que ese Informe fuera trasladado a la oposición y a día de hoy seguimos sin él y por tanto no sabemos que hay que ocultar, cual es el oscurantismo en este caso” denuncia.
Asimismo, el portavoz socialista denuncia que han pasado 18 días desde que la empresa presentó el Informe y no se ha dado traslado a los grupos municipales. Sobre todo, para dar un mensaje de confianza y tranquilidad a los trabajadores de la plantilla, ante la creciente preocupación por la incertidumbre del futuro del servicio.
Por último, Pedro Casares recuerda que el equipo de gobierno del PP reconoció que se puede disminuir el personal del servicio si se producen mejoras tecnológicas, tal y como figura en el pliego y confirmaron en la comisión extraordinaria. Y por tanto, este silencio desde el 24 de diciembre “no es buena señal”.
