El secretario general del PSOE y portavoz municipal en el ayuntamiento de Santander, Pedro Casares, denuncia la amortización anticipada de 7 millones de euros de deuda como evidencia de “un modelo político agotado”.
Casares señala que, en el Pleno del Ayuntamiento, este jueves 29 de noviembre, el equipo de gobierno del Partido Popular propondrá esta medida. Una medida que la Alcaldesa logrará aprobar “con el voto del concejal tránsfuga”, tal y como sucedió en la Comisión de Hacienda, que se ha celebrado previa al pleno, y que el equipo de gobierno ha ocultado.
“La alcaldesa y el PP viven en el mundo al revés, son incapaces de gastan lo que presupuestan, y además tampoco ejecutan los remanentes positivos de tesorería. Unos remanentes que podrían destinar a inversiones productivas y financieramente sostenibles para mejorar la ciudad y la calidad de vida de la gente”, censura el edil.
Políticas a contracorriente
Esto, a juicio del líder socialista, responde a “políticas de otro tiempo”, en los que se priorizaba el pago de deuda en vez de invertir el superávit en políticas “que redunden en el beneficio de los vecinos”, como lleva pidiendo la Federación Española de Municipios y Provincias desde 2015. “Van a contracorriente de las necesidades de Santander” enfatiza.
El líder de los socialistas santanderinos explica que los remanentes de tesorería se producen por la falta de inversión y ejecución del presupuesto municipal. “Una situación irresponsable, que practican sistemáticamente y que ralentiza la inversión en la ciudad”.
Para el portavoz del PSOE, es “inasumible” que, además de los 10 millones de euros presupuestados para pago de la deuda en el presupuesto de 2019, se destine también el remanente de tesorería a pagar de forma anticipada más deuda. Recordando a su vez, que en base al informe del Interventor General, a 30 de septiembre de 2018, el 55% de las previsiones de gastos del presupuesto de 2018 “están sin ejecutar”.
Y como ejemplo de la no ejecución presupuestaria, ha señalado que en el presupuesto de 2017 “el 75% de las inversiones no se llevaron a cabo, es decir se quedaron sin invertir.
Por último, Pedro Casares pide al PP que el ayuntamiento invierta el superávit en políticas activas de empleo, infraestructuras educativas, políticas sociales, seguridad, o en políticas de igualdad. “Como reivindica la FEMP y la mayoría de ayuntamiento tras dejar atrás las malas políticas de Rajoy y Montoro, que son ya pasado, y que tanto daño estaban haciendo a los municipios”, concluye el edil.